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El Modelo EFQM es un marco de gestión útil y adaptable para cualquier organización, especialmente para las fundaciones que trabajan con personas con dificultades. Así se plasmó en el evento online ‘Cómo generar confianza a través de la gestión excelente’, organizado por el Club Excelencia en Gestión y la Asociación Española de Fundaciones (AEF).

En este encuentro participaron como ponentes tres fundaciones dedicadas a dar apoyo a personas con discapacidad intelectual y física: Fundación Ampans, Fundación Once y Fundación Prode, que dieron a conocer su experiencia de trabajo con el Modelo EFQM. Éste ha facilitado su transformación a lo largo de los dos últimos años, marcados por la pandemia. Una etapa que ha servido para replantear convenciones, romper con malos hábitos, cambiar prioridades, abordar nuevos retos y también nuevas oportunidades.

Queremos dejar aquí algunas de sus reflexiones:

• Jordi Mir, responsable de Calidad de Fundación Ampans, comentó los beneficios que les ha aportado trabajar con el Modelo EFQM desde 2009, así como así como los proyectos de mejora vinculados a mantener vigente su Sello EFQM 500. En su caso, les ha ayudado a integrar todas las partes de la organización y a mejorar la comunicación con sus grupos de interés, especialmente con sus alumnos y sus familias.  También a reenfocar la labor de sus líderes para motivar a los trabajadores y analizar el valor y los resultados tanto de las alianzas como del desarrollo tecnológico y de las infraestructuras instaladas. Pero, sobre todo, a establecer una coherencia en sus acciones, para que todas estén alineadas con el propósito de la organización.
• Araceli Araujo, responsable de Calidad de Fundación Prode, resumió su experiencia con el Modelo EFQM, con el que llevan trabajando desde 2015, y con los reconocimientos que la organización ha conseguido gracias a este marco de gestión. Todo ello ha hecho crecer su prestigio y la confianza de sus grupos de interés, incluidas las personas que trabajan en la Fundación, que han generado un fuerte sentimiento de pertenencia. Para Araujo es esencial que sea un modelo flexible que no haya que cumplir a rajatabla, con criterios orientativos que les ayudan a perfilar estrategias personalizadas. Y también que aporte herramientas para medir resultados y así saber qué acciones son correctas y cuáles se pueden mejorar.
• Virginia Carcedo, secretaria general de Inserta Empleo y directora adjunta de Formación, Empleo y Transformación de Fundación Once, y Marta Rivas, técnico en Fundación Once, destacaron también el poder del Modelo EFQM para ofrecer transparencia, trazabilidad y confianza para los grupos de interés.

Desde su punto de vista, ayuda a interiorizar el propósito y propicia la involucración de las personas, fomentando la participación, la comunicación y el trabajo en equipo. Lo llevan utilizando desde 2015 y se ha convertido en un elemento vertebrador que consigue que todos los líderes funcionales se comporten como piezas esenciales para lograr llevar a cabo el plan de excelencia de la organización. Por otra parte, reconocieron el valor del Club Excelencia en Gestión como acompañante a la hora de preparar la evaluación para conseguir el Sello EFQM, aportando evaluadores empáticos y siempre dispuestos a ayudar.

Casos como los suyos muestran cómo el Modelo EFQM es una fórmula útil para abordar la transformación continua y los retos de futuro que se les plantean a las fundaciones, marcados por la innovación y la sostenibilidad.

Si la fundación en la que trabajas quiere impulsar su transparencia y mejorar su confianza con sus socios, trabajadores, voluntarios y colaboradores, es un buen momento para utilizar un modelo de gestión flexible como el Modelo EFQM. Poneros en contacto con nosotros, podemos ayudaros.