Actualidad

Cada día que pasa vemos más y más buenas prácticas entre las organizaciones vinculadas al Club Excelencia en Gestión. Sodexo es otro ejemplo del que no podemos dejar de hablar. Con un negocio muy enfocado a la restauración y a servicios diversos que en estos momentos no están funcionando (escuelas infantiles, gimnasios, etc.), es una de esas empresas castigadas por la crisis del coronavirus. Sin embargo, está adaptando sus recursos para que ninguno de sus trabajadores se quede atrás.

Para empezar, su Comité de Dirección ha decidido de forma unánime renunciar al bonus variable del ejercicio 2019-2020 para impulsar, con una dotación extra, el Fondo Social de ayuda para los empleados afectados por el cese de actividad. Además, desde el inicio de la crisis ha planteado planes de continuidad de negocio y de actuación, asegurándose de que sus equipos tienen las herramientas y la información necesaria para reducir riesgos de transmisión.

En este sentido, también está trabajando con sus clientes de forma proactiva, facilitando los pedidos online, aportando documentos descargables sobre seguridad durante la pandemia, e informando en todo momento de cómo está la situación desde sus equipos locales. De hecho, han trabajado día tras día, adaptándose a las nuevas realidades que han ido surgiendo en pocas semanas sobre higiene, seguridad alimentaria y control de infecciones.

Empezando con la restricción de viajes de trabajo, pasando por la limpieza y desinfección de las superficies de alto contacto, e incluyendo formación a los equipos de base sobre cómo actuar ante casos sospechosos o confirmados. En general, adoptando medidas de forma ágil gracias a un modelo de gestión transformador para garantizar la salud y la seguridad de trabajadores, colaboradores, clientes y de la sociedad en general.