El informe analiza las percepciones, expectativas y necesidades de los universitarios de la Generación Z respecto a su formación académica y futura inserción laboral.
Basado en encuestas a 400 estudiantes de toda España y 75 de grados en comunicación, el estudio revela una profunda desconexión entre la universidad y el mundo profesional: el 75% considera que no está preparado para el empleo y casi la mitad no ha hecho prácticas.
Los estudiantes demandan más formación práctica, contacto con empresas y capacitación tecnológica actualizada. A nivel de preferencias laborales, los Zetas priorizan el salario, el ambiente de trabajo y la conciliación, pero muestran desconfianza hacia las grandes empresas, prefiriendo pymes familiares y entornos colaborativos.
El informe también evidencia una percepción generalizada de falta de oportunidades en España para el talento joven y una alta disposición a emigrar, principalmente a Europa.